Desde 2013 Titaguas celebra este evento el
primer sábado de agosto. Una fiesta mágica en
la que por una noche la iluminación pública deja
paso a la luz tenue y cálida que proporcionan
miles de velas en calles, ventanas y balcones,
creándose así un sugestivo y evocador ambiente
que sirve de marco a actuaciones musicales
en los más bellos rincones de la villa.
La luz de las velas y la música son las protagonistas
de la noche más bonica del año.